El amor surge sin avisarte, y cuando esto pasa te arrolla, lo destroza todo como un tsunami, y una vez que llega
Por otra parte...¿Un príncipe azul? Un hombre sin fallos, digamos perfecto, que no comete locuras, que está demasiado encima tuya, todo el mundo estaría pendiente de ti y tendrías que guardar las apariencias... En resumen, que el color azul destiñe y en el país de las maravillas
Yo prefiero a un lobo feroz... Sí, aun que suene extraño, caperucita roja no era tan tonta... Un lobo, que te vea, que te escuche, que te coma... Que cometa locuras, de decisiones claras, no tener que preguntarte por las consecuencias o el qué dirán... El mañana ya llegará, y cuando llegue, pues ya veremos lo que hacemos, pero hasta entonces comámonos el momento o lo que no es el momento...
Envolvamos nuestro amor en papel de liar para que la pasión se encienda al prenderlo.